Cuando alguien trabaja para sí mismo estableciendo un negocio, es prioritario considerar la seguridad legal. Una de las maneras de hacerlo es contratar un seguro de responsabilidad civil para autónomos: Esto significaría pagar por los daños que surjan como actos de negligencia o omisiones resultantes del desempeño profesional.
Los seguros RC brindan una protección a los autónomos para amparar contra reclamaciones resultantes de una negligencia, cumpliendo con la LOPD y ofreciendo coberturas frente a sanciones que ésta pueda producir.
En muchos casos, la responsabilidad civil para los autónomos es un requisito imprescindible por ley para ejercer ciertas actividades profesionales. En algunos sectores concretos tales como el de servicios financieros, legales, hostelería y restauración, ocio y espectáculos, espacios deportivos, agencias de viajes y los sanitarios entre otros, tener contratadas pólizas de responsabilidad civil es una obligación legal. Esto se debe a que por su naturaleza estas actividades conllevan potencialmente riesgos mayores que tendrán un impacto negativo en carácter y credibilidad del negocio si no se posee el debido seguro.
Incluso, en el contexto de presentar una oferta o solicitud para desempeñar determinados trabajos también puede exigirse condición indispensable contar con la capacidad financiera necesaria para hacer frente a vías legales derivadas de problemas relacionados con la actividad realizada bajo la figura del autónomo. De este modo no sólo cumple el rol preventivo sino también servirá como garantía ante un posible conflicto por parte del cliente.
Independientemente de que sea o no obligatorio contratar un seguro de responsabilidad civil, ¿es recomendable?
Es importante destacar que en todas las circunstancias, aún cuando no se exige por ley de manera específica contratar un seguro de responsabilidad civil, hacerlo es vital. Esto se debe a que una vez cometido algún error profesional, podría existir la demanda de diferente índole; así sea daños legales, patrimoniales o personales por parte del cliente.
Si nuestra actividad comercial no ha sido cubierta con el seguro correspondiente, los posibles reclamos tendrán consecuencias muy graves para los bienes y recursos de la misma. Por ello, es vital contar con un seguro o cobertura que ampare al negocio en caso de demandas legales, daños materiales o pérdidas patrimoniales debidos a errores profesionales.
Las coberturas de un seguro de responsabilidad civil para autónomos proporcionan una amplia gama de protección, además del daño físico, abarcando áreas como la indemnización por violación de derechos de propiedad intelectual, los gastos que conlleven errores documentales o la presentación de avales en situaciones judiciales.
En definitiva, los seguros de Responsabilidad Civil suelen ser vistos como una inversión fundamental para cualquier profesional que trabaja por cuenta propia. Independientemente del sector al que te dediques, es importante elegir los seguros adecuados que resulten apropiados para el sector o actividad desempeñada.
Si necesita información especializada no dude en preguntarnos pues disponemos de todo el conocimiento del sector y una gran variedad de productos para satisfacer tus necesidades y las de tu perfil profesional.